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Uno de los pilares de ADA, el software de ventas inteligentes creado por D5 Smart Solutions, es la sencillez de su interfaz de uso. La tecnología invita al usuario a trastear de una forma ágil e intuitiva, escapando de complejos filtros y cadenas de datos
Lo simple, decían los clásicos, es bello. Y por extraño que parezca, el viejo aforismo ha alcanzado su epítome en una era tan compleja como la actual. Democratizar la tecnología, hacerla accesible a tantas personas como sea posible, es uno de los retos de esta era para los desarrolladores. Y es precisamente ese mandato el que ha forjado la identidad y dimensión de de ADA, el software de ventas creado por D5 Smart Solutions.
En realidad, ADA es el fruto de algo tan prosaico como observar. Aunque el imaginario colectivo ha consolidado la idea de que la tecnología es compleja y difícil de entender, lo cierto es que algunas de las multinacionales con mayor éxito actualmente son los padres de herramientas terriblemente sencillas de usar.
Google es quizás el mayor exponente de esta forma de hacer las cosas. Una sencilla web con una caja en el centro de todo en la que únicamente hay que esbozar ideas: consultas, productos, personas, empresas… Busques lo que busques, Google te ofrecerá una propuesta.
Amazon a la hora de comprar, Facebook o Instagram para crear una identidad digital… Por supuesto, también los smartphones, todo un universo al alcance de cualquiera que se puede manejar con apenas un dedo. Muchas de las tecnologías más populares del momento han hecho de la sencillez su hoja de ruta irrenunciable. Como dice el ilustrador Frank Chimero: «La gente ignora el diseño que ignora a la gente».
Pero no nos llevemos a error. Lo simple puede ser absurdamente sofisticado en su interior. Cualquiera de las tecnologías y productos de empresa que hemos citado previamente son increíblemente complejas e inaccesibles para el gran público. Los intestinos de cualquier teléfono inteligente, el famoso algoritmo de Google o la capacidad del entorno Meta para procesar datos y perfilar a los ciudadanos son solo algunas de las incontables manifestaciones de esa forma de hacer las cosas:
Sencillas por fuera. Un laberíntico universo por dentro.
Los dos pilares del software de ventas
Cuando creamos un software de ventas como ADA, en D5 Smart Solutions nos identificamos con esa hoja de ruta. Los pilares debían ser dos, y ambos igual de importantes: fácil de usar, poderoso (y por tanto complejo) a la hora de transformar la información.
Así pues, la interfaz de uso debía ser una parte diferencial del software de ventas. Simple de usar, al alcance de cualquier persona. ADA apenas requiere de destrezas digitales. Con un ratón y un poco de sentido común es posible trastear a diario y enviar cientos, o miles, de mensajes comerciales altamente personalizados.
¿Cómo es eso posible? Por la capacidad de la tecnología de cerrar el ciclo de la venta. Desde la detección de la oportunidad de venta hasta la creación y lanzamiento del mensaje comercial. ADA se encarga de todo porque el proceso dentro de la interfaz es muy intuitivo:
- Selecciona un servicio o producto.
- Formula una pregunta a ADA.
- Escoge al cliente al que quieres impactar por wasap o mail.
- Elige una plantilla comercial personalizada para ese producto o servicio. Po cierto, podrás editarla si quieres o enviarla tal cual te la muestra ADA.
- Pincha en el botón de enviar.
El siguiente vídeo es un breve tutorial en el que se puede entender cómo funciona el software de ventas:
Olvídate de los filtros
Para conquistar estos niveles de usabilidad, una de las cuestiones centrales del proceso de desarrollo de ADA fue la eliminación de filtros. Siempre tan útiles para discriminar y afinar las búsquedas, pero por extensión un obstáculo para el usuario porque con frecuencia exigen de rutas o procesos de selección y suma que despistan a los usuarios menos avezados en lo digital.
Puede que esto resulte un tanto extraño para multitud de profesionales del márketing, la publicidad o las ventas, pero es así. Uno de los desafíos que tienen multitud de CRMs que están hoy en el mercado es precisamente mejorar la usabilidad porque sus clientes se ven lastrados a la hora de usar la herramienta.
Y no solo por falta de destrezas tecnológicas, algo lógico habida cuenta de las estadísticas sobre brecha digital. También por la intensidad de uso. Son incontables las pymes españolas que carecen de equipos especializados en ventas. Dicho de otro modo, con frecuencia es el dueño quien se encarga de la gestión, la comunicación, los proveedores, el trato con los clientes…
En este escenario, dominar un software de ventas que permita impulsar el negocio es poco menos que una odisea si la operativa con el programa no es sencilla e intuitiva. ADA aspira a ser todo eso, y además intenta cerrar el círculo de la venta al facilitar a la clínica, la academia, o la empresa de bienes de consumo todo lo que necesita:
- Datos inteligentes al formularle las preguntas a la herramienta
- Propuestas de venta totalmente personalizadas para sus clientes.
Las ventas inteligentes al alcance de apenas unos clics.
Explota los datos, descubre un mundo de posibilidades
Porque este es el auténtico poder de una tecnología como ADA. Su capacidad de estructurar y procesar los datos de cualquier empresa y presentarlos de una forma tan fácil de gestionar que cualquier persona de una organización podría sacarles provecho en forma de ventas.
Renunciar a hacerlo es un lujo que ninguna compañía debería permitirse hoy. Y de nuevo las estadísticas revelan que queda mucho por hacer. El Informe Tecnologías Digitales en la Empresa que elabora el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital sostiene que apenas un 14% de las pymes españolas recurren al big data para dinamizar sus actividades.
En definitiva, hay faena por delante pese a que no hay dudas sobre la importancia de los datos. La experiencia con un software de ventas como ADA es un de nicho, incipiente por el momento, pero sin duda revelador:
Es posible generar rellenar agendas, vender bienes o servicios o descubrir oportunidades de negocio aprovechando las soluciones de big data de esta tecnología. ADA aprende de los datos de cada empresa para identificar ventas y generarlas con solo conectarse a un software de gestión.
Seguramente los datos nunca estuvieron tan al alcance de la mano de cualquier empresa.
Mucho más que un software de ventas
Es esa potencia derivada de su capacidad de hacer big data y su sencilla interfaz de usuario la que está permitiendo a las empresas visualizar esa cualidad de ADA de ser algo más que un software de ventas. Porque ADA es una herramienta de negocio, por descontado, pero también un generador de engagement.
Un vehículo para acercarse a la base de clientes de cualquier empresa (una clínica, una óptica, una academia o una asesoría, da igual) de otra forma. Siguiendo una ruta bidireccional con el cliente, tratándolo de una forma muy personalizada y alejada de esos mensajes estandarizados que tanto empiezan a chirriar en la mente de los consumidores.
ADA sirve para vender, desde luego, pero también para conectar. Para comunicar. Para felicitar el cumpleaños de una forma muy simple, o para acordarse de la primera vez que alguien entró en el negocio, una suerte de efeméride de la que ciertamente vale la pena acordarse.
Las ventas del futuro serán más, y mejores, si quien te ofrece un producto o servicio no solo te entiende y reconoce. Además, no te ve como un simple número más dentro de una base de datos.